La soga.

Alguien ajusto demasiado el torniquete.

Cuando era un niño, alguien ajusto una soga para mí, el motivo era simple: Yo no tenía nada que hacer aquí.

Si pienso en todas las personas que abren sus ojos, y quizás sienten lo mismo que yo, entonces esta historia va a tener un significado aún mayor.

Luchas de luchas: Levantarse temprano, pero con el cuerpo pesado, hacer inmensas filas para cobrar el salario, tener jefes ignorantes que nos tratan como fichas de ajedrez, el juego es simple, solamente hay que cruzar los dedos hacia la suerte.

Cuando mis papás se divorciaron, sentí alivio. Es una pena decirlo. Pasamos esta vida tratando de encontrar un balance dentro de lo que es bueno y de lo que es malo, pero en realidad, la soga que ellos mismos ajustaron, sello el trato. Es justo amar a una persona en toda tu vida, pero no es justo ser modificado a conveniencia ni tampoco a la patada.

La violencia es como un dardo, me acostumbre a ver a mi madre conocer muy bien el piso, porque ahí es donde todos querían verla.

Alguien ajusto demasiado el torniquete de mi pierna, pensé. Vamos recolectando lección tras lección, triunfo tras triunfo, dolor tras dolor e incluso alegría tras alegría.

Mientras el dolor pasa, solamente hay que admitir que estamos en este plano de manera temporal.

Graduarme, tener trabajo e independizarme. El plan era simple. Pero pasa que si naces del lado marginado de la sociedad, eso ya no será posible ni tampoco tangible.

Todo esto me recuerda a que me estoy quedando sin tiempo para ser importante a los ojos de la sociedad.

Pero a quien le importe: Siempre me ha valido madre, si ven mi valor o no. Estudiante a costos, pasante a pretender calzar en un rol laboral explotador y porque no, ahora soy un desempleado en todo el significado de la palabra, solamente porque no tuve una educación de peso ni tampoco los mejores diplomas del mercado, la realidad es otra, en el lado de la ignorancia, nacen flores de deshonra.

Soy una constante decepción para mis padres, y aun así me preguntan si algún día voy a tener mi propia familia. Una vez que la soga se ajusta a tu cuello, es muy fácil perder el balance.

Yo crecí leyendo historias de superhéroes, pero en realidad temía convertirme en uno de ellos, yo crecí tratando de no ser igual que mis hermanos, porque no tenía un ejemplo que seguir.

Ahora que me muero de hambre, pienso en todas las veces que intente llenar mis vacíos internos con personas temporales y amores alquilados.

Ahora que el dolor en mi pecho es real, ya no queda a nadie a quien culpar. El peso de la soga, es inteligente. Veo a personas todos los días salir y elegir su mejor maquillaje, mientras el mundo se cae a pedazos.

El peso de la soga, es atrevido. Veo a mi alrededor, y de pronto alguien más está jalando de mis cuerdas como una marioneta.

El peso de la soga, no es temporal. Veo como muchas veces me quiere derrotar. Es válido tener una fe inquebrantable, pero hasta el más fuerte, siempre se cae.

Fue justo pedir por perdón, pero el sol ya estaba muy lejos de mí.